Ya hemos visto que la menopausia no es una enfermedad y tampoco es una desgracia.

Puesto que sólo hay dos posibilidades: o afortunadamente llegamos a la menopausia, o nos quedamos en el intento y morimos antes. Y nadie queremos quedarnos en el camino. Así que no es una desgracia, sino precisamente todo lo contrario: todo un éxito biológico. Tiene mucho mérito el llegar tan lejos. De hecho, no todas llegan.

La menopausia es una etapa natural (una más) de la vida. Una etapa en la que seguimos disfrutando de la vida, del afecto y del sexo. En la que ya no tenemos el miedo a quedarnos embarazadas. En la que podemos ayudar a nuestras hijas, a nuestras nietas y a través de ellas a la especie en su conjunto. Nuestra aportación es valiosísima e imprescindible.

¿Que esta nueva etapa conlleva unos cambios hormonales y fisiológicos? Pues sí. ¿Que necesitamos una ayuda para llevar lo mejor posible tales cambios? Pues también.

Cada mujer es diferente y se trata de estudiar la ayuda y en su caso el tratamiento más adecuado para cada mujer. Y es que además de complementos naturales, contamos también con muy diversas posibilidades, dentro de lo que es la terapia hormonal sustitutiva.

La terapia hormonal sustitutiva tiene distintas modalidades:

• Píldoras
• Parches subcutáneos
• Geles

El objetivo de todos estos recursos es tratar de que los cambios hormonales tengan lugar de una manera progresiva y controlada.

Si deseas más información acerca de la Terapia hormonal sustitutiva, puedes ponerte en contacto con nosotros o acercarte a la Clínica Askabide, para pedir cita y ayudarte lo antes posible. Llevamos más de 30 años ayudando a nuestros pacientes.