Poco a poco vamos logrando más recursos que nos permitan controlar la dimensión reproductiva de la sexualidad. El objetivo primordial es la prevención, es decir, la utilización de métodos anticonceptivos sencillos y eficaces. Pero no siempre se utilizan, o incluso -a veces- puede fallar un método. También en estos casos hay que dar respuesta ante un posible embarazo no deseado. Una respuesta rápida y sencilla.

Hoy en día disponemos de una serie de métodos de regulación de la fertilidad que nos permiten decidir si deseamos o no tener hij@s, el momento y el número.

No obstante, a veces surgen problemillas en la puesta en práctica de la regulación de la fertilidad. 1) A veces, por falta de información acerca de los métodos y de su uso correcto; 2) Otras veces porque algunos métodos tienen una cierta tasa de fallos; y 3) Pero también por errores humanos, y muy especialmente por fiarnos de “seudométodos” que en la práctica no impiden el embarazo. Especialmente la llamada “marcha atrás” y “las fechas”. ¿Y qué podemos hacer?

Qué hacer

Pues bien, en aquellas situaciones en las que ha surgido algún problema, y que se pudiera producir un embarazo, podemos poner remedio sin esperar a que se confirme el embarazo y tener luego que interrumpirlo. Afortunadamente, existe una medicación pensada para este tipo de situaciones.

Los métodos anticonceptivos -condón, espermicida, píldora, parche, anillo vaginal, Diu, vasectomía- se utilizan antes de o durante el coito. Sin embargo, en este caso se trata de una anticoncepción postcoital, es decir, una anticoncepción de emergencia.

La píldora del día después es una solución pensada para tomarla siempre que haya una situación de riesgo: una relación sin protección, un condón roto, o que se queda dentro... Hay que dejar bien claro que hay riesgo de embarazo a lo largo de todo el ciclo. Incluso cuando estamos con la regla. No hay días sin riesgo. Ninguno. Ninguno a lo largo de todo el ciclo. Porque aunque teóricamente la ovulación tiene lugar hacia la mitad del ciclo, lo cierto es que en la vida de una mujer hay mil factores -mil- que pueden adelantar o retrasar la ovulación. Desde una preocupación, un examen, un régimen de adelgazamiento... Total, mil factores.

En definitiva, que más vale tomar esta píldora independientemente de cuándo se haya tenido la regla. A no ser, claro, que se quieran correr riesgos...

Cuándo tomarla

Hay que tomarla lo antes posible, ya que su efectividad va descendiendo según pasan las horas. Por tanto, no podemos dormirnos. La rapidez es fundamental.

Cuántas se toman

Años atrás se tomaban hasta 8 píldoras. Luego 2 píldoras, con un intervalo de 12 horas. Luego las 2 a la vez. Y desde hace ya algunos años se toma un solo comprimido, con un poco de agua. Sin más.

Cómo actúa

Como se toma tan temprano, no sabemos si ha producido o no un embarazo. No existe modo alguno de saberlo. Ni mediante un test de embarazo, ni mediante ecografía. Lo único que sabemos es que estamos en una situación de riesgo. Para evitarlo, la píldora del día después actúa a 3 niveles:

1. Inhibe la ovulación si aún no se ha producido. Para ello, bloquea el ovario antes de que libere el óvulo.
2. Si el óvulo está atravesando la trompa hacia el útero, impide la fecundación antes del contacto con el semen.
3. Si el óvulo hubiere sido fecundado, la píldora del día después produce unos cambios en la pared del útero -obstaculizando la fabricación de progesterona-, lo cual impide la posible implantación en la pared del útero y por tanto, el desarrollo del huevo.

Si no ha habido fecundación, no tiene efecto ni consecuencia ninguna.

La efectividad de la Píldora del día después

La efectividad de la píldora del día después depende del tiempo transcurrido. En concreto, de las horas transcurridas. A más horas transcurridas desde el momento de la relación de riesgo, menor efecto.

• 0 - 24 horas: 95 %
• 24 - 48 horas: 85 %
• 48 - 72 horas: 58 %

Más allá de las 72 horas, su efectividad baja drásticamente. Por eso es de vital importancia tomarla lo antes posible. Si es el mismo día de la relación, mucho mejor. Si por la hora o por lo que sea, no fuese posible, a primera hora del día siguiente. Es una carrera contra el tiempo.

Conclusión

Si la interrupción del embarazo es actualmente muy sencilla, la «píldora del día después» -o anticoncepción de emergencia- es aún más sencilla. Pero no se debe abusar. Es un recurso de emergencia.

Para evitarlo, lo que hay que hacer es aprender de la experiencia y utilizar un método anticonceptivo realmente eficaz. Olvídate ya de la prehistórica marcha atrás, olvídate de oginos, fechas y calendarios, y utiliza un método que te resulte cómodo pero que al mismo tiempo sea realmente eficaz.

Por ejemplo, el nuevo DIU Mirena, cuyos índices de fiabilidad son prácticamente del 100 %, y te proporcionan una tranquilidad y una libertad que no tienen precio. Y además te protege durante 5 años. Y encima tendrás: 1) menos días de regla; 2) menos cantidad de sangrado; y 3) menos molestias menstruales. Así ya no tendrás que andar de susto en susto. Y siempre con miedo. El miedo es el mayor antídoto del amor.

Si deseas más información sobre la Píldora del día después, puedes ponerte en contacto con nosotros o acercarte a la Clínica Askabide, para pedir cita y ayudarte lo antes posible. Llevamos más de 30 años ayudando a nuestros pacientes.