La ecografía ha marcado un antes y un después en el control del embarazo. Es la prueba prenatal más importante por la cantidad de información que es capaz de ofrecer. La ecografía nos permite conocer el tiempo de embarazo, el tamaño del feto, la evolución de su peso, el tamaño del cráneo, el corazón, posibles malformaciones, y un largo etcétera. Toda esa información nos permite actuar a tiempo y corregir posibles problemillas que se pudieran presentar. Es una técnica sencilla, inocua e indolora. No implica radiación ni exposición, por lo que es una práctica segura tanto para ti como para tu bebé.
Al mismo tiempo, tranquiliza a las madres y padres respondiendo a todas esas preguntas que te van surgiendo: ¿Cuántos son? ¿Será un ectópico? ¿Está bien implantado? ¿Se mueve? ¿Está creciendo bien? ¿Es niña o niño? ¿Son patadas lo que siento? ¿Cuánto pesa ya? ¿Cómo está colocad@? ¿Y la placenta? Y os permite disfrutar de las primeras imágenes en 2D, 3D y 4D de vuestro bebé y oír los latidos de su pequeño pero fuerte corazón.
Actualmente la ecografía es una prueba imprescindible y se realizan varias a lo largo del embarazo. Pero el seguimiento de embarazo se va perfeccionando día a día, de modo que podemos obtener aún más información.
Si deseas más información acerca de las primeras ecografías, puedes ponerte en contacto con nosotros o acercarte a la Clínica Askabide, para pedir cita y ayudarte lo antes posible. Llevamos más de 30 años ayudando a nuestros pacientes.